RAEE

RESIDUOS DE APARATOS ELECTRICOS Y ELECTRONICOS RAEE


RAEE es el término informal popular que se utiliza para referirse a los productos electrónicos que se acercan al final de su “vida útil”. Computadoras, televisores, VCRs, estéreos, fotocopiadoras y facsímiles son productos electrónicos comunes. Muchos de estos productos se pueden reutilizar, restaurar o reciclar. Por desgracia, los desechos de productos electrónicos componen el grupo de desperdicios de mayor crecimiento en Colombia y el mundo. Además, algunos investigadores calculan que cerca del 75 por ciento de los aparatos electrónicos viejos se encuentran almacenados, en parte debido a la incertidumbre de cómo manejar los materiales.



Como en Colombia no se cuenta con una legislación específica al respecto se toma como modelo la RAEE de la Unión Europea (mayor información en: www.escrap.com.ar), pero considerando el actual nivel de desarrollo, es decir, promoviendo de forma gradual los objetivos de reciclaje, y considerando que el RAEE no debe ir a contaminar rellenos sanitarios o basureros municipales. Por lo tanto, este proyecto busca además la promoción de:



• La reducción de las sustancias peligrosas que se usan en ciertos productos electrónicos que se venden en Colombia.

• El cobro de una cuota de reciclaje de desecho electrónico en el lugar de venta de ciertos productos.

• La distribución de las cuotas obtenidas por la recuperación y el reciclaje a entidades calificadas para llevar a cabo la recolección y el reciclaje de desechos electrónicos.

• Desarrollar una guía que establece los criterios de compras, que tomen en cuenta al medio ambiente, cuando las autoridades gubernamentales departamentales y municipales adquieran ciertos equipos electrónicos.



La mayoría de los aparatos electrónicos contiene una cantidad de materiales, incluyendo metales, que se pueden reciclar. El reciclaje de los viejos aparatos electrónicos ahorra recursos y protege el medio ambiente porque no es necesario extraer metales nuevos. Además, algunos productos electrónicos contienen altos niveles de ciertos materiales, como plomo, cromo o cadmio, que los convierte en residuos peligrosos cuando son desechados.



Son considerados peligrosos los televisores, PCs, baterías y monitores descartados por tener compuestos de plomo, cadmio, PCBs, cromo, bromo, entre otros. Razón por la cual estos aparatos no deben ir con la basura municipal. Para reciclarlos o exportarlos, se requiere un permiso especial del órgano competente de cada país que evalúe el impacto ambiental de tales operaciones, así como cumplir con tratados internacionales como la Convención de Basilea para el movimiento de Residuos Peligrosos.



El tema de la basura electrónica, ‘e-basura’ como se le conoce, si bien es responsabilidad de los gobiernos, se convierte en un tema de interés para las comunidades. Los Residuos (chatarra) de aparatos eléctricos o electrónicos RAEE son peligrosos contaminantes que dañan a quienes los manipulan, contaminan el medio ambiente y suponen un alto riesgo para la salud.




“Hay una crisis real en lo que se refiere a la basura electrónica”, afirmó Jim Puckett, integrante del grupo estadounidense, Bassil Action Network, que debe su nombre a la Convención de Basilea, un tratado de las Naciones Unidas de 1998 que busca limitar el daño causado por los residuos electrónicos y al que se han suscrito todas las naciones, excepto Estados Unidos, que desecha cada año dos millones de toneladas de estos productos, entre ellos 50 millones de computadores y 130 millones de celulares.



Los expertos afirman que la basura electrónica es el desecho que más aumenta en el mundo desarrollado, debido a la reducción del costo de reemplazar computadores, teléfonos móviles y otros aparatos electrónicos, y a la velocidad con que la tecnología se vuelve obsoleta.



Esto significa que cada vez hay más desechos para eliminar y menos espacio para almacenarlos.



Al respecto, las empresas tecnológicas y los países desarrollados han empezado a ver con preocupación este problema y desde ya desarrollan iniciativas para empezar a frenar este tipo de contaminación.



En el caso de Colombia, el ministro de Ambiente y Vivienda, Juan Lozano Ramírez, y los operadores y fabricantes de móviles y celulares lanzaron a finales de 2007 una campaña de reciclaje de estos equipos en desuso.



“Esta campaña es la primera en América Latina que logra involucrar a todos los operadores de telefonía móvil y celular del país y a casi todos los fabricantes de celulares”, explicó Lozano Ramírez (Ex Ministro de Ambiente), los operadores y fabricantes señalaron que todas las personas que tengan móviles o celulares en desuso, llamen a los puntos de venta y servicio de su operador y éstos se encargarán de reciclarlos. “La intención de este compromiso es generar consciencia en los consumidores del peligro que acarrea el manejo inadecuado de estos residuos que generan riesgo para el planeta, así como para desarrollar un proceso adecuado de reciclaje”, puntualizó Lozano Ramírez.



A su turno, empresas que construyen computadores afirmaron que para el 2009 eliminará el uso de todas las sustancias para retardar el fuego basadas en bromo y los PVC, o cloruro de polivinilo, en sus productos.



También se han comprometido a deshacerse gradualmente en el futuro cercano de sustancias químicas peligrosas.



En Colombia hace falta más conocimiento con respecto al manejo de este tipo de residuos, por eso se presenta esta propuesta explicada en el Mapa Conceptual de la gráfica 8.



La Agencia Europea del Medio Ambiente calcula que el volumen de ‘e-basura’ está aumentando tres veces más rápidamente que otras formas de desperdicios, al punto que pronto llegará a 40 millones de toneladas métricas, suficiente para llenar una fila de camiones que recorrería la mitad de la circunferencia de la Tierra.



Para atajar el problema el Programa de Medio Ambiente de la ONU, la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos, universidades de los cinco continentes y empresas como Dell, Microsoft, Hewlett Packard (HP) o Philips se han unido en la iniciativa solucionar el problema de ‘e-basura’.



Se busca estandarizar los procesos de reciclado globalmente para recuperar los componentes más valiosos de la basura electrónica, extender la vida de los productos y armonizar las legislaciones y políticas.



En este sentido, Klaus Hieronymi, gestor ambiental en Europa para una fábrica de computadores, señaló que uno de los mayores problemas para el reciclado de ‘e-basura’ es la falta de una legislación homogénea.



“Cada país tiene diferentes objetivos, medidas y mecanismos”, lo que en pocos años obligará a las empresas productoras de computadores a enfrentarse casi con un centenar de leyes en todo el mundo, señaló.



Es por ello que las empresas del sector están a favor de la homogeneización de las leyes y reglamentos.



El otro factor es que para la producción de electrodomésticos y ordenadores se utilizan metales preciosos, como el oro o la plata, pero la creciente demanda de otros metales los está convirtiendo en materiales de extremo valor. Es el caso de indio, un derivado del zinc que se utiliza en más de 1.000 millones de productos cada año, desde pantallas planas a teléfonos celulares.



En los pasados cinco años, los precios de este metal se han multiplicado por seis y en la actualidad es más caro que la plata. Aún así, el reciclado de indio sólo se realiza en un puñado de instalaciones en Bélgica, Estados Unidos y Japón, país donde a través del reciclado se obtiene casi la mitad de sus necesidades de indio.



Igual sucede con el bismuto, utilizado en soldaduras para evitar el uso de plomo, que ha duplicado sus precios desde el 2005, y el rutenio, utilizado en resistencias y discos duros, cuyo valor se ha multiplicado por siete desde principios del 2006.



Cada ciudadano produce en la Unión Europea, entre 17 y 20 kilos de basura electrónica anual, y un 90 por ciento de las cantidades totales siguen sin ser sometidas a tratamientos de incineración o recuperación.



En Colombia no existe legislación en esta materia. Tal vez porque las urgencias del país y el bajo consumo de bienes informáticos nos aleja de un debate que no aparece dentro de las prioridades de nuestras autoridades ambientales. Eso parecen indicar estudios, como el realizado por la firma International Data Corporation IDC, el cual señala que la penetración de computadores en el país es apenas de cuatro por ciento y que la tasa de computadores personales por habitante en edad de trabajar, es de 1,2 computadores al año por cada 100 personas. El promedio en los países desarrollados es de 14 computadores por año por persona en edad de trabajar.



Sin embargo, la comprensión del concepto de basura electrónica abarca todos los aparatos que para funcionar debidamente necesitan corriente eléctrica o campos electromagnéticos. Dentro de esta categoría, según la Directiva Europea encontramos entre otros, los grandes electrodomésticos, pequeños electrodomésticos, equipos de informática y telecomunicaciones, aparatos electrónicos de consumo, equipo médico, juguetes y maquinas expendedoras. En otras palabras, la noción de basura electrónica, abarca desde neveras, lavadoras, cocinas, pasando por aparatos de aire acondicionado, hasta todo tipo de equipos informáticos.



En Colombia, no existen estudios sobre la cantidad de electrodomésticos susceptibles de ser destruidos o reciclados, pero si existen cifras que nos indican que la venta de electrodomésticos crece día tras día. Veamos brevemente el alcance de la Directiva Europa como un referente normativo para abordar el problema en nuestro medio:



• Se debe fomentar que los fabricantes de bienes eléctricos y electrónicos, procuren la reutilización y reciclado de sus partes, componentes y materiales.

• Se deben adoptar medidas tendientes a reducir la eliminación de bienes eléctricos y electrónicos, como residuos urbanos no seleccionados.

• Establecer sistemas de recogida de bienes electrónicos de consumo, para su reciclaje o destrucción. La recogida de los equipos en los hogares se hace por cuenta de los fabricantes.

• Los fabricantes deben adoptar sistemas para el tratamiento y reciclado de los residuos, sujetos a los permisos y a los procedimientos de calidad que definan los Estados miembros.

• Varios fabricantes pueden crear sistemas colectivos para el tratamiento y reciclado de los residuos.

• Se debe informar a los consumidores sobre sus obligaciones en cuanto a la recogida y selección de los residuos y los efectos contra el medio ambiente y la salud humana por la presencia de sustancias peligrosas.

• Definición de sanciones eficaces, proporcionadas y disuasivas por la no observancia de la ley.



Teniendo en cuenta que la mayoría de fabricas de productos electrónicos se concentra en pocas ciudades Capitales de Colombia, se debe emprender una campaña de concientización a los distribuidores de estos equipos electrónicos que la responsabilidad social que tienen con cada ciudad; y más concretamente que el comercializador informe a sus clientes una vez compren aparatos eléctricos y electrónicos, sobre la importancia en el manejo de estos artículos cuando dejan de funcionar, así mismos clientes se multiplicarán el mensaje a sus familiares y amigos.